Laura Vilaseca y la sensación agridulce de Ultimate Móstoles tras el Split 2 de Queens

El Split 2 de Queens League Oysho ha sido una montaña rusa de emociones para Ultimate Móstoles. Buen comienzo con cuatro victorias en las cinco primeras jornadas, bache posterior y la sensación de que, pese al buen juego, la regularidad no acababa de llegar. Llegaron los Playoff y La Mostoleta se transformó, eliminando a equipos que habían quedado por encima en la fase regular. En la final no salieron las cosas, sin embargo, y la decepción general se apoderó de la plantilla.

Un Split de altibajos en La Mostoleta

Laura Vilaseca, uno de los grandes pilares del equipo, recibió el premio a la portera con más paradas de la Queens. Un galardón que recogió con cara de pocos amigos, tras el 1-4 sufrido contra xBuyer Team en el WiZink Center. Transcurridos unos días, es hora de analizar detenidamente lo sucedido en estos tres últimos meses. «Creo que empezamos bien el Split, encadenando cuatro triunfos seguidos».

«A medida que avanzaba, íbamos mejorando aspectos del juego. Colectivamente se veía la mejora, pero la suerte y los resultados no eran los que queríamos. Aunque en los partidos clave dimos la talla y nos salieron las cosas, hubo una fase del Split en que los resultados no eran los que queríamos», desgrana.

Pese a que inicialmente eran favoritas en la final contra xBuyer Team, no pudieron sacar a relucir su mejor juego. «En la final el sentimiento que tuvimos fue de decepción, de no haber podido dar más. De haber dado el 100% y que las cosas no salieran. Ahora toca pensar en lo siguiente, levantar la cabeza y seguir para adelante, porque no hay otra. Va a ganar el que se levante antes», remarca Laura Vilaseca.

Vilaseca, exigente consigo misma

«Tristeza y decepción por no haber podido dar más y llevarnos la victoria, que es lo que nos habría gustado a todas», resume, sin estar tampoco del todo contenta con el rendimiento que ha aportado. Eso, a pesar de que ha sido la guardameta con más intervenciones salvadoras del torneo. «A nivel individual creo que aún no estoy al máximo nivel. Por temas personales, no empecé muy bien el Split…», lamenta.

«Poco a poco fui remontando, gracias al equipo, al staff, a los presidentes que siempre nos animan… Y un poco gracias a la afición y a mi familia, que siempre me ha estado apoyando. A medida avanzaba el Split fui cogiendo buenas sensaciones y encontrándome más cómoda, se veía en mis actuaciones», añade la cancerbera del equipo de Noelia y DjMariio. Si bien es cierto que no ha sido el Split que esperaba, el hecho de haber llegado hasta la final le pone «contenta, a pesar de lo que pasó en el WiZink».

La experiencia como aprendizaje

Su voluntad es que, de cara a las siguientes competiciones, la experiencia sirva a Ultimate Móstoles para aprender y ser más competitivas. «Es lo que toca, seguir y mirar hacia adelante. Levantarse con más fuerzas, y dar el máximo en el próximo Split para ayudar al equipo en todo lo que sea necesario», concluye. Probablemente habrá algún cambio en la plantilla, lleguen o no nuevas jugadoras de Draft. Vilaseca, en cualquier caso, confía en que el equipo vuelva a luchar por títulos en el futuro.